Tras un par de días o semanas de haber tenido a tu bebé es muy probable que observes más cabellos en el cepillo, en la almohada o incluso en el baño, pero ¡no te asustes! la caída de cabello es completamente normal después del parto por todos los cambios hormonales que ha tenido tu cuerpo.
Algunas personas creen que la lactancia puede ser una de las causas por las que el cabello se cae, sin embargo, esto es totalmente falso, ya que las mujeres que no dan pecho también pueden sufrir caída del cabello.
El estrés de los primeros días, el cansancio, la falta de sueño y la alimentación pueden ser algunos de los factores más importantes que puedan estar influyendo para que se te caiga el cabello.
Algunos alimentos que pueden ayudar a que se te caiga menos el cabello son aquellos que contienen vitamina B como: aguacate, espinacas, avena, nueces, pollo, pescado, entre otros.
Evita el uso de planchas, secadoras, tintes o cualquier cosa que pueda dañar tu cabello; tampoco te cepilles de manera brusca para que la caída sea mucho menor.
¡No te preocupes!
Después de algunos meses verás que tu cabello comienza a crecer. Sin embargo, no olvides consultar con tu médico si la caída se vuelve excesiva o si después del año se sigue cayendo para que te recomiende el uso de algunos shampoos o tratamientos.