Si decimos “una persona creativa”, seguramente pensaremos en algún escritor, pintor o músico. Es normal asociar la creatividad con el arte o creer que sólo gente muy talentosa es realmente creativa, pero eso no es verdad. La creatividad se puede estimular, aprender y, sobre todo, usar para cualquier momento de la vida. Ser creativos nos ayuda a solucionar retos en el día a día, ver el otro lado a las cosas e incluso aplicarlo en nuestro trabajo diario.
¿Pero eso qué tiene que ver con tu bebé? ¡Muchísimo! Porque la creatividad es más fácil de explotar si se aprende desde muy pequeño.
Desde que nacen, los bebés tienen una curiosidad muy grande por el mundo que les rodea. Quieren aprender y absorber con todos sus sentidos la información que les damos; por eso es el momento ideal para despertar su creatividad, estimulándolos para que, mientras crecen, tengan pensamientos y experiencias diferentes que podrán relacionar para tener nuevas y originales ideas.
Te compartimos diferentes consejos que pueden ayudarte a estimular la creatividad de tu bebé:
Activa sus sentidos: tu bebé conoce el mundo con sus sentidos a través de sonidos, texturas, sabores, colores y todo aquello que les parezca nuevo, divertido y emocionante. Por ello, procura darle a tu bebé diferentes sensaciones en objetos que pueda tocar, comidas distintas cuando pueda comer sólidos, colores y figuras para que las vea y distinga. Jugar con él o ella es importantísimo, sobre todo si el juego involucra todos sus sentidos.
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Despierta su imaginación: aunque tu bebé aún no hable, para él o ella es muy importante escucharte. Cuéntale cuentos con lenguaje muy sencillo, vean películas o usa sus juguetes para inventar historias. Aunque suena increíble, tu bebé está absorbiendo todo y pronto lo verás inventando sus propios cuentos y contándote cosas todos los días.
Crea juegos y juguetes con tu bebé: observa qué artículos en tu casa le llaman la atención, pueden ser cubiertos, cajas o adornos. Sabemos que puede asustar ver a tu bebé jugando con cosas que no son necesariamente juguetes, pero con el cuidado necesario y la libertad suficiente, verás que su curiosidad le obligará a buscar más y más cosas.
No existen los errores: evita corregirlo cuando falla en los juegos sencillos. Si buscas formas de hacer esos errores algo divertido o las fallas en nuevos aprendizajes, tu bebé perderá el miedo a fallar y correrá más riesgos, esto es una de las bases más importantes de la creatividad.
Sí existe la estimulación en exceso: los bebés también tienen un límite y cuando lo alcanzan, demasiados estímulos pueden ser contraproducentes y agotadores. Si lo notas cansado, agresivo, se frota sus ojitos o empuja sus juguetes o a ti, es su forma de decirte que está demasiado ansioso. Lo mejor es detener los juegos, dejarlo descansar y calmarlo con los cariñitos de mamá.
Un bebé que tiene los estímulos apropiados durante sus primeros meses y años será un niño o niña que podrá relacionarse mejor con el mundo y siempre podrá ver cada problema como una oportunidad.