El momento de tener a tu bebé entre tus brazos está por llegar, después de varios meses de espera por fin lo conocerás y vivirás la etapa más linda de ser mamá. Tú y tu bebé son los protagonistas de este bello escenario y por eso debes saber que el parto respetado los protege a ambos, antes, durante y después del alumbramiento.
¿El parto qué?
Es muy probable que este término te sea nuevo, aunque existe desde hace algunos años cuando la Organización Mundial de la Salud, OMS, determinó el parto respetado o parto humanizado, como un derecho legal para que tú, como mamá, puedas decidir sobre algunas prácticas y métodos que se usan al momento de tener a tu bebé.
Por ejemplo, ahora tienes el derecho de solicitar que tu pareja pueda acompañarte y estar presente durante todo el tiempo que dure la labor de parto, lo cual genera comunicación y unión entre las familias que elijan esta opción.
Entre otros beneficios además del acompañamiento, podemos mencionarte los siguientes:
- Elegir la posición en la que quieras dar a luz.
- Rechazar prácticas invasivas y exceso de tacto.
- Evitar medicamentos no justificados.
- Decidir entre alumbramiento normal o por cesárea.
- Solicitar una técnica de relajación, meditación o aromaterapia para sobrellevar de mejor forma el alumbramiento.
- Recibir de inmediato a tu bebé para fortalecer el vínculo personal mediante el contacto piel a piel.
Como podrás darte cuenta, saber que tienes el poder de decidir cómo tener a tu bebé, te da mayor seguridad y tal como lo considera la OMS, favorece con un excelente índice de calidad de vida, tanto para ti, como para tu recién nacido.
Incluso está comprobado que al contar con el respaldo del parto humanizado, tendrás una satisfacción plena y distinta respecto a la experiencia de la maternidad, lo cual también disminuirá la probabilidad de tener depresión posparto y/o dificultades de lactancia.
Ahora que lo sabes, considera el parto respetado como una opción para cuando llegue el momento tan importante en tu nueva vida como mamá.