Los masajitos es una increíble forma de disfrutar con tu bebé después del baño, antes de dormir o cuando está inquieto. Pero ¿has imaginado que también pueden ayudarte a relajar ciertas zonas de su cuerpo e incluso ayudarlo con algunos malestares?
Aquí te contamos un poquito más sobre estos masajes.
- Salida de dientitos. Masajea la zona superior de sus deditos para ayudarlo con las encías hinchadas y malestares de sus primeros dientes.
- Flemas y moquitos. El masaje en los deditos puede ayudarlo a respirar mejor cuando tiene flemas o moquitos.
- Si los cambios de temperatura hacen sentir inquieto a tu bebé, masajea la zona superior de sus pies para aliviar las molestias de su pechito.
- Cólicos. Al hacerle un masajito en el centro de las plantas de sus pies, puedes ayudarlo con los molestos cólicos. ¡Verás como su carita cambia cuando lo haces!
- Gases y estreñimiento. Si tu bebé presenta gases o dificultad para hacer popó, masajea esta zona de sus pies, así lo ayudarás a relajar la parte superior de su abdomen.
- Gases y estreñimiento. Al igual que el punto anterior, esta zona le ayudará a aliviar molestias en la parte baja de su abdomen.
- Cadera y pelvis. Por último, el masaje en los talones, le ayudará con las molestias en la cadera y en las etapas de crecimiento.
Recuerda realizar los masajes de forma suave ya que son solo una forma de ayudar a relajar a tu bebé, por lo que te recomendamos consultar con tu pediatra cualquier malestar o duda que tengas, para que puedan seguir disfrutando más tiempo juntos.