
Rutina para cuidar los pies de tu bebé
La higiene de un bebé es muy importante, y todas las partes de su cuerpecito necesitan cuidados. Bañarlos, ponerles talco, vestirlos con ropa limpia es básico, pero sus piecitos también requieren que los vigiles y tengas una rutina para apapacharlos y atenderlos.
Por Kleen bebé - 07 nov. 2022
La higiene de un bebé es muy importante, lo sabemos, y también hay que recordar que todas las partes de su cuerpecito necesitan cuidados. Bañarlos, ponerles talco, vestirlos con ropa limpia es básico, pero sus piecitos también requieren que los vigiles y tengas una rutina para apapacharlos y atenderlos. Por eso, te recomendamos tener en cuenta los siguientes consejos:
- Lávalos y sécalos muy bien todos los días: Cuando sea la hora del baño, frota bien sus piecitos con agua y jabón neutro, limpiando bien entre los dedos. Igualmente, al momento de secarle, revisa bien que no quede humedad entre ellos, pues esto podría formar hongos u otras molestias.
- Corta sus uñitas frecuentemente: Las uñas de los bebés crecen muy rápido y, aunque parezcan blandas, si se descuidan, pueden lastimar a tu pequeño o a otros, por lo que debes revisarlas y cortarlas frecuentemente. De preferencia, hazlo después del baño, pues el agua ayuda a que estén más suaves, y usa un cortaúñas para bebé. Corta sólo la parte blanca y si queda alguna zona que sientas áspera o afilada, usa una lima de uñas suave para alisarlas.
- Ponles solamente calcetines durante el primer año: Busca calcetines de algodón, no muy gruesos, y verifica que no le queden apretados, pues es importante que pueda mover sus deditos. Después de un tiempo, ponle zapatitos, también de material blando, con los que pueda mover sus pies con comodidad.
- Permite que aprenda a caminar descalzo: Durante los meses en que tu bebé empieza a pararse solito y querer caminar, deja que lo haga sin calcetines o zapatos, además vigila siempre que no haya nada en el piso que lo pueda lastimar. Es recomendable que lo haga, pues esto favorece su capacidad de caminar y el desarrollo de sus pies.
- Mantén vigilados sus piecitos: Acarícialos, tócalos, velos todos los días. Familiarízate con su temperatura, color, forma. Si percibes cualquier cosa fuera de lo usual, como enrojecimientos, ampollas, heridas, bolitas o endurecimientos, es señal de que algo está pasando y recurre a tu pediatra para que lo revise.
Con esta rutina de cuidado de pies, podrás ayudar a tu bebé a desarrollarse lo mejor posible, así como también se acostumbrará a atender y limpiar bien sus pies, pues a muchos adultos se nos olvida cuidarlos como se debe.