El terror de toda mamá se llama, pompis rozadas, lo sabemos y por eso te compartimos algunos consejos que te ayudarán a mantener a ese monstruo lejos de tu bebé.
- Revisa el pañal de tu bebé constantemente para que esté sucio el menor tiempo posible, y el contacto con la pipí no lastime su piel.
- Una vez que lo cambies, límpialo con toallitas húmedas KleenBebé®
- Suavelastic, de preferencia que sean suaves.
- Deja que la zona del pañal se seque completamente antes de ponerle uno nuevo.
- En caso de que le des pecho, mantente alejada de alimentos irritantes que hagan más ácidos sus desechos.
- Sabemos que tu bebé crece día con día, por eso es importante que su pañal sea de la talla correcta y no le quede justo.
La clave para que tu bebé se mantenga libre de rozaduras está en el pañal, puedes elegir KleenBebé® Comodisec, para que esté sequecito y cómodo por más tiempo.